domingo, 23 de marzo de 2025

Breve recorrido por mis novelas: Himeko y otros cuentos lúgubres (2018)

 Himeko y otros cuentos lúgubres. Editorial Cazador, 2018.



Muchos escritores empiezan fogueándose en el relato corto y con el tiempo llegan a la novela. Yo hice algo parecido, escribí algunos borradores de cuento antes de publicar Claro de Luna, pero no es un formato en el que me sintiera cómodo al principio.

Sin embargo, siempre me ha parecido una forma interesante y divertida para jugar con las historias de terror que se me ocurren.

Mis primeros cuentos trataban de causar un impacto rápido y lo más visceral posible. Con historial breves inspiradas en los referentes que yo tenía entonces en cuanto al cuento corto de horror, desde Poe a Lovecraft y especialmente a Stephen King. Se fueron publicando por aquí y por allá en antologías colectivas de diferentes asociaciones y editoriales, dándome la oportunidad de compartir páginas con grandes autores españoles.

Algunos de esos primeros cuentos me gustan mucho, otros pues no tanto. Siempre he pensado que el formato breve no es lo mío.

En todo caso, llegado un momento sentía que tenía un ramillete de media docena, quizá alguno más, de esos cuentos que no me disgustaban en absoluto. Algunos habían llamado la atención en alguna antología, otros habían quedado finalistas en algún concurso, pero nunca los había recopilado para publicarlos juntos en un volumen que mostrara mis diferentes facetas como narrador.

Ofrecí la idea a la editorial Cazador y publicamos Himeko y otros cuentos lúgubres, mi primera antología propia, con algunos de esos primeros relatos ya publicados.

Por Himeko desfilan samuráis sanguinarios que homenajean a Barba Azul en el viejo Japón feudal, monstruos clásicos que recorren los campanarios de París, fantasmas de piratas a bordo del mítico navío conocido como el Holandés Errante, hombres lobo que no saben que lo son e incluso una pareja desgraciada en su última noche en la Villa de Teguise, en Lanzarote.

Y si los cuentos que componen esta antología me encantan, qué decir de la portada, diseñada por Imanol Pérez, y que sigue siendo una de las más bonitas de mi carrera.

Breve recorrido por mis novelas: Despiértame para verte morir (2018)

 Despiértame para verte morir. Editorial Cazador, 2018.



Comentaba en un post anterior mi descontento con la edición original de Despiértame para verte morir, un thriller psicológico que fue acogido en 2013 por la editorial Planeta pero que nunca publicó en papel.

A mí la novela me encanta, creo que la premisa inicial, el argumento y el giro final quedaron bien y que el diseño de personajes está más o menos logrado. Por el cariño que le tengo, después del éxito de Alicia se la ofrecí a Cazador para sacarla en formato físico y Carmen Moreno, una vez más, bendito su olfato, no se lo pensó un instante.

Despiértame para verte morir trata de la pérdida, no sólo en el sentido emocional, que por supuesto, sino de la pérdida de estatus, de la derrota profesional, del ostracismo.

Marcus Crane es un joven abogado que lo tiene todo, que es la esperanza de una familia de fiscales. Sin embargo, tropieza con un caso criminal terrible: el asesinato de una niña a manos de Richie Santoro.

La investigación ligada a lo que en la novela se conoce como el Caso Santoro sumerge a Marcus en un infierno de horror y pesadillas, lo que le llevará a abandonarlo todo: su ciudad, su mujer, sus amigos, y su carrera.

Cuando años después decide escribir sobre el caso y recuperar su vida, será testigo en primera persona de los terribles asesinatos de sus seres queridos. Crímenes que recrean con cruel fidelidad lo que Santoro le hizo a esa niña.

Despiértame para verte morir es una novela breve pero dura y directa, que no da tregua al lector y que me sirvió para profundizar de nuevo en la psicología del Mal y en sus consecuencias sobre el ser humano.

Como curiosidad, es una de mis pocas novelas que no suceden en Canarias, ya que necesitaba el elemento ligado a la pena de muerte, así que me la llevé un pueblo ficticio estadounidense.

Una de mis preferidas.

sábado, 22 de marzo de 2025

Breve recorrido por mis novelas: Allister Z y el misterio de los esqueletos (2018)

 Allister Z y el Misterio de los Esqueletos. Cazador de Ratas, 2018.



Después de las tres publicaciones que colmaron el año 2016, decidí echar el freno al año siguiente y plantearme con calma los pasos a seguir. Así que en 2017 me dediqué a la promoción de esas tres novelas y a escribir sin prisa.

Aunque había tocado a veces el cuento infantil, una de las cosas que todavía no había hecho era escribir una novela juvenil, y tenía clavada la espina de que mis alumnos y alumnas quisieran leer algo del profe y solo encontraran en las librerías suspense, terror y violencia. Entonces la editorial Cazador de Ratas, salvadora de nuevo, como si Carmen, su editora, me leyera la mente, me propuso la idea que cambió mi carrera de repente: ¿Por qué no escribes una novela de terror para niños?

Recogí el guante sin pensarlo mucho, con una mezcla de ilusión, responsabilidad y ganas de travesura. ¿Cómo se escribe terror para niños sin causarles rechazo ni miedo? Le di algunas vueltas, me planteé acercar a los niños a los mitos y personajes clásicos de terror que hoy prácticamente se han perdido, y decidí rescatar a un personaje muy querido para mí pero aún desconocido para el público: el atolondrado niño zombi, Allister Z.

¿Cómo nació Allister Z? Un par de cursos atrás puse en marcha un blog escolar para animar a mi alumnado de 6.º a la escritura creativa. El protagonista era un niño, Allister, que tras un accidente mortal era devuelto a la vida por su padre, Viktor, un científico pasado de vueltas, en un argumento que homenajeaba con mucho humor negro a una de mis novelas preferidas, Frankenstein o el moderno Prometeo. Diseñamos al personaje, le dimos una biografía, y los niños y niñas tenían que escribirle cada semana una pequeña aventura ya que, obviamente, Allister tenía que ir al cole como todos los demás.

Allister Z es un personaje entrañable y su primera novela, El misterio de los esqueletos, una locura divertida y emocionante llena de referencias a la literatura y al cine de terror clásicos, con unas ilustraciones espectaculares de Francisco José Asencio.

Una oportunidad maravillosa que salió bien y que me ha dado enormes alegrías.

domingo, 16 de marzo de 2025

Breve recorrido por mis novelas: Alicia (2016)

Alicia. Editorial Cazador de Ratas, 2016.


El género thriller es mi pasión. Me encanta el misterio, también el terror y me gusta mucho escribir romántica, pero ¿por qué no juntarlo todo en un solo género? Para mí eso es el thriller.

A veces confundimos novela negra con thriller y, aunque se parecen, no tienen por qué ser lo mismo.

‘Alicia’ llegó como una evolución lógica después de ‘Última parada: la casa de muñecas’ y ‘Despiértame para verte morir’. Un paso más en mi visión del thriller, mezclando de nuevo intriga, suspense y terror.

La intención, en este caso, era retratar el Mal desde diferentes puntos de vista, identificados con los tres villanos que presenta la novela. Tres hombres opuestos en muchos aspectos pero, al final, reflejos de ese mismo Mal.

Si ya en las novelas anteriores había tratado de manera más o menos consciente la psicología del villano, en ‘Alicia’ realicé el esfuerzo intencionado de mostrar el diablo interior que cualquier ser humano puede albergar sin saberlo.

La protagonista de la novela, María, es uno de mis personajes preferidos, una mujer que sufre una de las evoluciones personales más intensas de toda mi obra, y que demostró un coraje y una fuerza que incluso a mí me sorprenden.

Estoy muy agradecido a Cazador de Ratas por dar cabida a este trabajo, que recibió en 2017 el premio Ultratumba a la mejor novela del año, y que tantas alegrías me ha dado.

Una de mis mejores novelas, sin duda. 

miércoles, 12 de marzo de 2025

Breve recorrido por mis novelas: Tomb Raider: El viaje de Lara Croft (2016)

 Tomb Raider: El viaje de Lara Croft. Dolmen. 2016.



La segunda publicación de 2016 no ha corrido la misma suerte que La chica que oía canciones de Kurt Cobain, y no será porque no me hiciera una especial ilusión o porque le dedicase menos cariño.

En aquella época la editorial Dolmen estaba poniendo en marcha una línea dedicada al mundo del videojuego, en la que se analizaban algunas de las curiosidades y la evolución de los títulos más conocidos. Cuando recibí su llamada propuse desarrollar Silent Hill, pero me ofrecieron Tomb Raider y la historia de Lara Croft se convirtió en el centro de mi universo durante todo un año.

Habiendo jugado, disfrutado y terminado todos los títulos desde el primero, y siendo un fanático de los videojuegos, sumergirme en la saga de la arqueóloga aventurera fue como ver realizado un sueño. Así que recopilé información, leí y releí, estudié, sinteticé, seleccioné y me lo pasé como nunca.

Antes de analizar cada propuesta de la saga, comencé el libro hablando del papel tradicional de la mujer en los videojuegos de aventura, habitualmente el de personaje a ser rescatado o el interés romántico del héroe, y cómo Tomb Raider había supuesto un cambio de paradigma y la primera vez en la que el peso de la narrativa de un videojuego recaía en un personaje femenino.

Si bien es verdad que Lara Croft “nació” hipersexualizada, para después evolucionar con cada entrega, no se puede negar la importancia de su propuesta en el rumbo de género en los videojuegos.

Creo que quedó un trabajo digno, muy completo y espectacular visualmente, gracias a una maquetación preciosa. Lástima que sea tan difícil de conseguir.


jueves, 6 de marzo de 2025

Breve recorrido por mis novelas: La chica que oía canciones de Kurt Cobain (2016)

 La chica que oía canciones de Kurt Cobain. Editorial Siete Islas. 2016.



El año 2016 fue extraordinario en cuanto a publicaciones, ya que salieron editados hasta tres trabajos. El primero de ellos, que justo cumple ahora nueve años, fue La chica que oía canciones de Kurt Cobain.

Recuerdo perfectamente cómo surgió este proyecto, ya que nació el mismo día que vino al mundo mi hija.

Aquella mañana de julio, a solas en el salón de casa, recién llegado del hospital, me cayó de golpe la realidad de que de pronto, en lo que tarda un suspiro, me había convertido en padre y dejaba atrás una etapa para empezar otra. ¿Cómo había llegado hasta allí?, me pregunté. ¿Cuántas cosas, cuántas decisiones, cuántas personas, me habían hecho quien era?

Regresé inconscientemente a 1994, el año en que mi familia y yo volvimos de Madrid a Las Palmas, por segunda vez, esta para quedarnos definitivamente. Y encontré en esos años, mis 14, 15 o 16, el momento de inflexión de alguien que pasa de la infancia a la adolescencia, que deja amistades para hacer otras, que descubre una ciudad nueva, que se enamora por primera vez, que empieza a trazar el camino que le llevará, un día muy lejano, a ser padre.

La chica que oía canciones de Kurt Cobain no habla de Nirvana, ni de grunge, ni de forrar carpetas con fotos. Habla de eso y de mucho más. Habla de la vida, habla de lo que nos sucede en determinado momento a todas y a todos. Es una novela que me parece muy bonita, y que encontró en la editorial Siete Islas la casa ideal para vivir.

Podría pasar horas hablando de Pablo y de Layla, de cuánto hay de mí, de mi familia, de mis vivencias reales. De cuánto significa esta novela para mí. De cómo varias editoriales la rechazaron por no ser del todo juvenil, por no ser del todo adulta, por utilizar el habla canaria, por ser… diferente.

Quizá un día lo haga. De momento es mi novela más vendida y una pequeña joyita de la que estoy muy orgulloso.


lunes, 3 de marzo de 2025

Breve recorrido por mis novelas: El fabricante de muñecas y En la oscuridad. 2014/2017.

 El fabricante de muñecas y En la oscuridad. Planeta de Libros. 2014/2017.


Los responsables del Grupo Planeta no habían encontrado argumentos suficientes para editar Despiértame para verte morir en ninguna de sus líneas en papel, pero sí volvieron a contactar conmigo para ampliar el catálogo digital de Click Ediciones. Decidí que podía ser una buena oportunidad para rescatar del olvido al bueno de Matt el Rojo.

Poco después de la publicación de Última parada: la casa de muñecas, la editorial 23 Escalones se vio obligada a cesar su actividad, lo que dejó sus novelas en un espacio incierto. Nuestras intenciones de darle continuidad al personaje quedaron lamentablemente aparcadas, y cuando Click contactó conmigo por segunda vez pensé que reeditarlo, aunque fuera en digital, podría ser la manera de recuperar la posibilidad de escribir una continuación para Matt.

Click, además, se llevaba consigo también No podrás salir y me planteaba la posibilidad de editar ambas en un nuevo sello en papel de impresión bajo demanda, Universo de letras, sin cobrarme nada sino para tener material con el que arrancar. No sonaba mal.


Desarrollamos un proceso de revisión, una nueva corrección y les dimos un lavado de cara, cambio de nombre y de portadas. Última parada: la casa de muñecas se convirtió en El fabricante de muñecas y No podrás salir pasó a llamarse En la oscuridad y, por su precio y tamaño, sigue siendo uno de los ebooks más vendidos en Amazon.

Un pasito más, otra aventura.

Breve recorrido por mis novelas: Laberinto (2015)

 Laberinto. Mercurio Ediciones. 2015.


Curiosamente, las publicaciones de Caminarán sobre la tierra en pleno declive de la Línea Z y Despiértame para verte morir pero solo en ebook, trajeron consigo el primer parón en mi carrera. Seguía escribiendo, disfrutaba mucho con ello, pero las posibilidades de publicar escaseaban. 23 Escalones había cerrado, Dolmen no había terminado de apostar por mí y volvían a acumularse los rechazos, igual que antes de ver la luz Claro de Luna. Parecía haberme estancado.

Acudí a la Feria del Libro de Arrecife de 2014 para firmar mis novelas y vi que la editorial Mercurio presentaba una de sus novedades en la carpa principal. Mercurio es una editorial canaria, de Las Palmas concretamente, a la que ya le había enviado en su día sin éxito el manuscrito de Claro de Luna

No tenía nada que perder: me aposté en la entrada de la carpa y cuando terminó la presentación abordé al editor de Mercurio con una propuesta que no sabía si querría aceptar: una aldea abandonada y envuelta en el misterio, una leyenda negra, hombres lobo y mucho, mucho terror.

Laberinto es una fábula sobre la soledad y el miedo a la pérdida. Escrita en un momento personal complicado, la historia de Ángel, el fotógrafo, tiene mucho más que ver conmigo que la de otros personajes que por el tipo de novela pudieran dar esa impresión. De hecho, es al único al que he cedido parte de mi nombre. 

Ángel se está quedando ciego y tiene el corazón roto. Antes de perder la visión anhela ver por última vez a la mujer por la que lo daría todo, y emprende un viaje que sale mal. Acaba perdido y aislado en el peor lugar posible: la aldea de Laberinto.

Entre sus calles retorcidas y sus casas silentes de ventanas tapiadas, conoceremos los secretos de una tragedia que se remonta muchos años atrás. Conoceremos a Andrea, a Rufio y al malvado Rape, uno de los villanos más salvajes que haya podido escribir.

Laberinto es una novela intensa, trepidante, y que no me canso de visitar. 


Breve recorrido por mis novelas: Despiértame para verte morir (2013)

 Despiértame para verte morir. Planeta de Libros. 2013.


A finales de 2012 se puso en contacto conmigo el Grupo Planeta. Ahí es nada. Iban a arrancar una línea de libros electrónicos, que primero se llamó Tagus y después Click, y querían contar con una novela mía. 

La elegida fue Despiértame para verte morir, una de mis novelas favoritas y que cedí a Tagus con la promesa de que “si funcionaba bien” Planeta la sacaría con uno de sus sellos en papel. Bueno. Todavía no sé qué es funcionar bien, pero en ebook se quedó. De momento.

Despiértame para verte morir apareció de repente, literalmente la soñé o, más bien, tuve una pesadilla tan vívida que al despertar tuve que anotarla. En esa pesadilla yo estaba sentado en el sofá de mi salón mirando la tele, cuando de pronto el aparato se ponía en modo nieve y al poco me mostraba mi propia imagen, como si tuviera una cámara oculta apuntándome desde su interior. Segundos después un hombre vestido de negro se acercaba por mi espalda y me estrangulaba con un cable.

Esa premisa me torturó durante días. ¿Qué pasaría si un personaje se viera forzado a visualizar su propia muerte? ¿Y por qué? 

Dediqué mucho tiempo a planificar el argumento. Quería, de nuevo, una novela coral pero mucho más íntima, más madura, con personajes profundos y relaciones más complejas entre ellos. Quería un protagonista de peso, un triunfador al que la vida le hubiera despojado de todo lo que tenía. Ese hombre fue el abogado Marcus Crane.

Como curiosidad, escribí la novela en tercera persona y una vez terminada me di cuenta de que ganaría mucha más tensión si la narrara en primera. Así que reescribí la novela entera cambiando las formas verbales y adaptando el texto. 

La elaboración de Despiértame para verte morir fue un proceso apasionante e intenso, y la puerta para acceder al Grupo Planeta y a su nómina de autores en Planeta de Libros. Todavía sigo por ahí.


Breve recorrido por mis novelas: Caminarán sobre la tierra (2013)

 Caminarán sobre la tierra. Editorial Dolmen. 2013.


El origen de esta novela se remonta a varios años antes de llegar a ser lo que fue. Yo llevaba mucho tiempo empeñado en escribir una historia de aventuras que contuviera elementos de thriller y misterio, al estilo de las primeras novelas de Arturo Pérez Reverte, que tanto me habían gustado. Desde El Club Dumas o La piel del tambor o, sobre todo, La Carta Esférica, me apetecía mucho mezclar intrigas y conspiraciones con elementos históricos y, por encima de todo, con el mar. 

Había caído en mis manos un artículo en el que se explicaban las tribulaciones de las reliquias de Cristóbal Colón y cómo varios países no se ponían de acuerdo en dónde habían ido a parar. Dediqué mucho tiempo a la investigación, a documentarme, visité lugares colombinos en Las Palmas de Gran Canaria, estudié la iglesia de Arucas, había seguido el rastro de los huesos del Almirante desde su sepulcro original hasta donde quiera que estén ahora y me empeñé en crear una trama que hiciera posible que un arqueólogo torpón las encontrara en Gran Canaria. Había llegado a planificar toda la novela hasta el momento en el que aparecía el cofre y entonces… No sabía cómo seguir.

Por esas fechas tuvo lugar el primer festival Celsius y nos juntamos varios amigos escritores en un almuerzo con el editor de Dolmen, que entonces triunfaba con la Línea Z de novelas de zombis. La apuesta surgió de una manera natural, cuando nos dimos cuenta de que el único de aquella mesa que no había publicado nada en la Línea Z era yo, y de repente se aclaró el trasfondo y el tercio final de mi novela de aventureros, arqueólogos, reliquias perdidas y buscadores de tesoros: mezclaría mi remedo de Indiana Jones con la tradición más pura de las películas de muertos vivientes.

Así surgió Caminarán sobre la tierra, una novela coral, repleta de guiños cinéfilos y de personajes que me encantan, como la capitana pirata Anne The Red Morrissey. Una novela de terror y aventuras que me permitió infestar de zombis Las Palmas de Gran Canaria, resolver el enigma de las reliquias de Colón y divertirme mucho.


sábado, 1 de marzo de 2025

Breve recorrido por mis novelas: No podrás salir (2012)

 No podrás salir. 23 Escalones. 2012.



El caso de esta novelita es curioso. Nació como simple relato de un escritor que todavía no lo era, muchos años antes de ser publicada. Uno de esos borradores que guardamos en cajones sin confiar demasiado en que algún día vea la luz. En aquellos días, ni siquiera Matt el Rojo estaba por ahí.

Sin embargo, durante la preparación de la publicación de Última parada: la casa de muñecas, la editorial 23 escalones decidió apostar por el resurgir de los bolsilibros en el formato tradicional de la antigua Bruguera: novelas cortas, de género puro, escritas por autores españoles que firmaban con pseudónimo anglosajón. Contactó con algunos de sus escritores y nos propuso formar parte de la que sería la línea Pulp de la editorial.

Como quiera que yo tenía guardado este relato acerca de una pareja acechada por un loco asesino en la cumbre de Gran Canaria, decidí reescribirlo incluyendo en la trama escenas secundarias, más personajes, una familia maldita y, por supuesto, a Matt el Rojo. De manera que aquel relato de mis inicios se convirtió en la precuela de Última parada: la casa de muñecas, y en una novela corta emocionante y divertida.

Para mi pseudónimo como autor terrorífico elegí el nombre Damien, por el niño protagonista de La Profecía, y el apellido Wake, por el videojuego Alan Wake, mi favorito. Y debo decir que disfruté muchísimo de la experiencia en el mundo de los bolsilibros. Ojalá hubiera habido ocasión de escribir alguno más.


Breve recorrido por mis novelas: Última parada: la casa de muñecas (2012)

 Última parada: la casa de muñecas. 23 escalones. 2012.



Mi cuarta novela fue LA novela. 

En todas las bandas hay un disco que rompe la barrera, a todo cineasta le llega esa película que despunta. En el caso de un escritor, hay una novela que hace que las cosas cambien. En mi caso, esa fue Última parada: la casa de muñecas.

El origen de esta novela es sencillo. Salí un noche del cine, con la que era mi pareja, y nos despedimos al subirse a la guagua en dirección a su casa. Era tarde y no habría más de dos personas, además de ella, en el vehículo. Me quedé en la parada mirando a mi chica y pensando: “caray, ¿y si el chófer está desequilibrado? ¿Y si ha tenido un mal día? ¿Y si no vuelvo a verla?”

Después de haber trabajado el suspense, el vampiro, la aventura gótica, me apetecía explorar la psicología del asesino en serie, así que aproveché la idea que me había dado esa pequeña escena para trazar los rasgos de un tipo de asesino que resultase grotesco, cruel y al mismo tiempo creíble.

Para combatirlo puse sobre el tablero al detective de origen irlandés Matt el Rojo, un hombre lleno de contradicciones, de luces y sombras, y demasiados problemas personales para ser considerado un héroe. Y como tercer personaje utilicé la ciudad de Las Palmas, aprovechando que había trabajado como comercial de calle muchos años y conocía bien sus rincones y sus curiosidades.

Última parada: la casa de muñecas es una novela dura, con un villano brutal y más de una escena intensa, como poco, pero quizá lo que la distinga de otras sea el punto de vista subjetivo que otorga a cada una de las víctimas antes de conocer su final. Una forma de generar empatía y cierto cariño en el lector, hacia personajes que, en algunos casos, están condenados.

Con un antagonista trastornado, que ni siquiera es consciente del mal que causa, y un protagonista irascible y sin razones para vivir, Última parada: la casa de muñecas supuso un empujón importante y un reconocimiento en una carrera literaria que apenas comenzaba. Fue mi segunda colaboración con 23 escalones, que desafortunadamente cesó su actividad poco después. 

Todavía hay lectores que se lo piensan dos veces antes de coger una guagua solitaria de madrugada. ¡Yetch!


Breve recorrido por mis novelas: Los ojos de Dios (2010)

 Los ojos de Dios. 23 Escalones. 2010.


¿Cómo empecé a escribir? Poniendo en papel todo lo que me hubiera gustado encontrar en los libros que leía, pero en los que no lo encontraba.

Esta suele ser mi respuesta cuando me preguntan cómo empezó todo. 

Lo cierto es que tras terminar la universidad, mucho antes de Claro de Luna o Noctámbulo, experimenté una época de intensa lectura. Devoré la obra de Stephen King, de Arturo Pérez Reverte, de Katzenbach, de Katherine Neville… Leí de todo, menos los libros de las oposiciones. Hacía ya un tiempo que había empezado a tontear con los relatos cortos —nada serio, doctor—, y estimulado por las lecturas y por el cine, decidí intentarlo en la novela.

Quizá el origen de Los ojos de Dios esté en esa escena de La amenaza fantasma en la que un sinfín de máquinas de combate asoman por una loma verde, o tal vez esté en la película La novena puerta, de Polanski (cinta a la que volveré a hacer referencia en otras novelas), el caso es que soñé, de algún modo, con una Puerta del Sol madrileña, llena de paseantes, que de un momento a otro resulta atacada por dos ejércitos rivales, sin aviso ni explicación, y el único recurso para la población civil es esconderse en los túneles del Metro.

A partir de ahí, cada capítulo de Los ojos de Dios revela un miedo, un misterio, un giro de guion en un enigma que, una vez se descubre, debe mucho a La última cruzada, de Indiana Jones.

Así, el cine y la lectura son responsables de que me dedique a esto de juntar letras. No podía ser de otro modo.

Como curiosidad, decir que el primer borrador de esta novela lo empezó a leer mi profesor y amigo, el gran escritor grancanario José Luis Correa, que me apuntó un buen número de posibles modificaciones. La más importante: escribe sobre lo que conozcas. Y tras seguir sus consejos el manuscrito fue aceptado por la editorial tinerfeña 23 escalones, que a partir de aquí me llevó de un festival a otro, de un contacto al siguiente y me puso en el mapa. Gracias eternas, Mónica.


Making off de "Las cinco muertes de Jacinto Samitier" en la revista literaria ZENDA

Charli Barreto debuta en la prestigiosa revista literaria Zenda libros con un artículo sobre el proceso de gestión y elaboración de esta novela tan particular. 


"Las cinco muertes de Jacinto Samitier" constituye un enfoque divertido de la novela negra que disecciono echando la vista atrás, recordando los días finales del confinamiento y cómo la posibilidad de quedarnos encerrados por un positivo a deshoras seguía presente.

Un tipo peculiar, Charli Barreto. Pasa por Zenda a conocerle.


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