Como he explicado varias veces en estos días, la publicación de 'Alicia' supone para mí el cierre de una etapa y el comienzo de otra. Termino una fase de lechón, en la que han primado el aprendizaje, la búsqueda y la experimentación por encima de todo. He tanteado géneros y estilos y he conocido un poco de lo que hay bajo la superficie del mundo editorial.
No he conseguido hacer ni la mitad del ruido que hubiera deseado y mis libros no van a figurar en las listas de "tops" de ninguno de vosotros, pero creo que estoy preparado para una segunda fase más consciente y meditada, en la que 'Alicia' precisamente marcará el camino.
Me retiro unos meses de los procesadores de textos para leer, ver, jugar y hacer hogar, que ya toca, y porque me apetece descansar y recargar el frasco de las ideas. Aunque, claro, sigo siendo yo, no os despistéis que alguna sorpresa habrá en 2017.
Digo esto justo antes de recuperar un viejo hábito: cuaderno de cuadros, boli bic y trama negra en la mente. Escribiré sin prisa.
Tengo mucho que agradecer a todos los que me han acompañado en esta primera vuelta a la pista. !Nos vemos en las librerías!
1 comentario:
No hace falta que un libro esté en el top para poder disfrutarlo y saborearlo, y tus novelas son garantía de esas cualidades, que aunque parezca fácil, no lo es, el lograr entretener y enganchar al lector
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